Aunque en muchos países y regiones los precios de la vivienda están bajando debido al endurecimiento de la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE), sigue habiendo zonas en las que comprar una casa se ha encarecido. Es el caso, por ejemplo, de la Costa Blanca, donde el precio de la vivienda se disparó cerca de un 10% el año pasado. "A pesar del encarecimiento, la demanda sigue aumentando", señala Carl Vorsselmans, de la agencia inmobiliaria "Nueva construcción en España".